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20 mar. 2018
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Conservación y mantenimiento. Elementos metálicos en fachada de edificios: el caso de las corrosiones por aireación diferencial en elementos
Inspección/ Evaluación de daños Patología AUTOR: Pedro Sánchez Gálvez, nº colegiado Coaatie_Murcia 868 PALABRA CLAVE: oxidación y corrosión. RESUMEN: Se agrupan normalmente estas dos acciones químicas (corrosión y oxidación) sobre los metales por ser normalmente simultáneas o sucesivas (por lo menos en los metales férreos) y, sin embargo, se trata de dos lesiones suficientemente diferenciables, tanto en su proceso químico, como en sus resultados. En cualquier caso, son dos tipos de procesos patológicos claramente químicos en los que tiene importancia, por un lado, el medio ambiente que rodea al elemento (acuso o seco) y la constitución metálica del propio elemento. Así, la oxidación es un proceso por el cual la superficie de un metal reacciona con el oxigeno del aire (o, a veces, del agua) que le rodea, produciendo una capa superficial de óxido del metal en cuestión. La corrosión, por lo contrario, es un proceso también químico (mas concretamente electroquímico) por el cual se produce una degradación superficial del metal en cuestión, al haberse formado una pila electroquímica en la que el metal actúa de ánodo (más negativo) perdiendo partículas que, con electricidad negativa, se desplazan hacia el cátodo (mas positivo). Artículo completo en Anexo